la búsqueda de seguridad, la autoridad

Interlocutor: ¿te has enterado de los abusos a estudiantes en esa escuela de Karate... Es un horror, verdad?

MT: si que lo es. Allí vemos una vez más las consecuencias de la búsqueda de seguridad.

I: no comprendo la relación.....

MT: Veamos esto despacio. Existe la teoría de que Dios, alguna divinidad, desciende sobre nosotros y nos ayuda a ser mejores, mas nobles, buenos, etc. Es muy simple y cómodo creer en esas teorías, y hay un sentimiento de que estamos seguros en ese aspecto: algo o alguien esta cuidando de mi y del mundo. Entonces aceptamos muy fácilmente el camino mas placentero y conveniente. Es muy cómodo vivir en esa rutina. El pensamiento es rutina y hábito...entonces aparece la autoridad de algún sistema religioso o místico que dicta las reglas, con las cuales si las sigues y no te desvías, encontrarás esa seguridad (sea Dios, el nirvana, la iluminación, etc.)

I: Y la escuela de Karate....?

MT: la escuela de karate es igual a lo que estamos hablando, es una disciplina en donde su maestro es una especie de vaca sagrada, en donde todos obedecen, y dejan de discernir...lo que la autoridad dice se cumple...Cuando nos ajustamos a una patrón religioso, psicológico o a cualquiera que hemos establecido para estar seguros, siempre hay una contradicción entre lo que soy y ese patrón. Si el conflicto que este choque entre lo que es y lo que debería ser, es muy profundo, se pasa a otro patrón mas conveniente.

I: eso es un nudo. Porque se nos educa para seguir ese esquema de autoridad.

MT: así es, se nos educa para seguir patrones, basados en ideales, conclusiones, creencias, normas, etc...

I: pero si no seguimos esas normas, !!todo sería un caos¡¡

MT: por el contrario, por seguir esas normas, es que todo es caótico. Esos patrones se encargan de dividir, confrontar, denostar, etc. Mi dios es mejor que el tuyo, mi ideología es la correcta y la tuya un dislate, mi club de fútbol es mejor que el otro....me identifico con esas ideas y excluyo al resto. Esa identificación hace que sienta que yo pertenezco, que no estoy sólo. Me siento seguro y protegido y por lo tanto aislado.

I: veo lo que dices y tiene mucha lógica...

MT: entonces ¿cómo voy a investigar este problema? Se necesita tremenda energía para encarar esta cuestión. Y esa energía se disipa principalmente en el conflicto de "lo que soy" y "lo que debería ser". El deber ser es un mero escape, es un recurso para no enfrentarme a lo que me pasa ahora. Si podemos ver la falsedad del escape, de la resistencia o de la represión, entonces esa energía que se ha perdido se concentra en tu presente y te permite observar.

Tomemos por ejemplo, que uno es envidioso, la envidia surge de la comparación, de la medida que hago arbitrariamente sobre un hecho cualquiera, y el pensamiento, que ha sido educado para escapar, lo hace de esta cosa llamada envidia. Ahora, si veo la falsedad de esa huida, todo se detiene y recupero tremenda energía para observar esta envidia.

No aplico la formula de los opuesto: "siento envidia, eso esta mal, por lo tanto la oculto y me esfuerzo en ser generoso y comprensivo". En el mismo momento que dices "yo soy envidioso" aparece un sentimiento que debo apartarlo, esconderlo, condenarlo.

Pero si descubro que la palabra envidia y su influencia no son lo que a mi me sucede realmente, recupero toda la energía y el sentimiento se disuelve.

I: no te comprendo...

MT: Es la palabra la que ha creado el sentimiento, es ella la que dicta el sentimiento, porque sin la palabra envidia, ¿existe ese sentimiento? Si no existe la palabra, o sea no hay movimiento en el pensar con sus identificaciones, escapes, etc. si no hay palabra que califique, ¿Hay envidia entonces?

I: ya veo y la búsqueda de seguridad tiene el mismo esquema...?

MT: claro, comprender los mecanismos de escape que hemos creado, investigarlos profundamente, sin emitir juicios, ni calificativos (esos son dos de las vías de escape más habituales), sino simplemente quedarte con lo que eres, producirá que una energía maravillosa-que es tuya y te pertenece- vuelva a ti, la recuperes y consigas licuar toda manifestación ilusoria de seguridad psicológica-emocional. Te transformas y descubres que eres tu la única autoridad en tu vida...Y ese es un irrepetible e intransferible acto de libertad interior.

pensamiento, cuerpo, conciencia.

Interlocutor: ¿tu crees que los dolores y las enfermedades están relacionadas con el pensamiento?

MT: no, no lo creo. Es un hecho.

I: ¿qué quieres decir?

MT: es sencillo. La forma de pensar, es decir, de ver la realidad, es quien nos determina los diferentes males que vamos a tener que transitar en el transcurso de la vida. Es un hecho.

I: no es exagerado ver las cosas de esa manera. ¿No hay ninguna enfermedad librada al azar, o a la fatalidad?

MT: ese es uno de los condicionantes mas cotidianos. Creer que las cosas me pasan por obra y arte del destino, o alguna fuerza misteriosa que se ensaña conmigo...es bastante infantil. Colocar la responsabilidad por fuera de mi, es un ejercicio muy normal entre las personas.

I: o sea, tu dices que soy en gran medida el culpable de todo lo que me sucede...?

MT: ¿Has dicho culpable? cuidado con esa palabra que denota una engañosa carga moral.

Lo que dije es resposable.

I: ¿Engañosa moral??

MT: claro, la moral siempre es excluyente y nace de contextos sociales determinados. Es totalmente limitada. De lo que hablo es de responsabilidad y comprensión.

I: Y cómo hago para descubrir por que me duele ésto o aquéllo, o sufro migrañas, etc?

MT: Ve al médico o profesional que corresponda. Pero tu debes hacer tu parte en descubrir las causas. El medico se ocupa del síntoma...tu miras las causas.

I. Pero ¿por dónde empiezo?

MT: Tal vez esto sirva: hemos trasladado la división que hay en el mundo externo a nuestro mecanismo de pensar, y así vivimos completamente divididos en fragmentos.

esas divisiones determinaran tu manera de ver las cosas, y aquellas que resistes o censuras, son las que abren la puerta a las patologías.

Cada parte de tu cuerpo... espalda, piernas, órganos, etc. son una representación material de tu manera de ser-pensar. y cuando hay resistencia, tu misma conciencia necesita equilibrarse por distintos medios. Uno es la enfermedad.

me gusta decir que el cuerpo es tu pensamiento hecho materia. Sintetiza muy bien lo que digo: por ejemplo, si eres una persona con conclusiones muy determinantes sobre muchos aspectos o tus creencias no te permiten suficiente movilidad, pues tus articulaciones "hablaran" a su manera.

I: por qué tendrían que "decir algo" si yo estoy contento como soy?

MT: uno esta narcotizado y no "escucha" a su cuerpo, sus gestos, posturas, dolores, etc....si realmente estás satisfecho contigo, no habrá ningún conflicto. Pero, permíteme decir, que la gran, gran mayoría estamos distraídos a esos mensajes.

I: ¿pero el cuerpo mismo busca la salud?

MT: diría mejor, que tu conciencia busca equilibrio, y eso se refleja en tu salud.

EL DISFRUTE

Interlocutor:"...a mi me cuesta disfrutar...."

MT:¿ que significa eso?

I: sencillamente eso. No me permito disfrutar, sea por falta de tiempo u otros motivos, siento que no disfruto...además me lo han dicho otros, incluido tu.

MT: es cierto, pero creo haberte dicho que "tienes que aprender a disfrutar..."

I: eso es.

MT: veamos y vayamos despacio. Si caminamos juntos es mas fácil.

Uno de los tópicos o creencias que hay sobre el disfrute es que es algo que se cultiva, que se practica. Que es un ejercicio cotidiano que te convierte en una persona "feliz, alegre y no sé cuantas más cosas"...pero realmente lo que mayormente hacemos es una persecución y degradación de momentos que realmente fueron de goce.

I:¿ cómo es eso?:

MT: El placer y el goce, parecen palabras con significado idéntico, pero sustancialmente implican hechos diferentes. Es decir, el placer esta relacionado con nuestro pasado. Es alguna experiencia determinada que la he registrado y trato siempre de repetir, de manera consciente o no. Esta búsqueda degrada la capacidad de goce. Intoxica y hace que permanentemente estés comparando. Y la insatisfacción está allí como una sombra.

I: Creo entender la diferencia entre placer y goce.

MT: mas allá de la situación semántica, el placer es algo a perseguir. El goce es el estallido espontáneo que te llena el cuerpo de vida...

I: pero ¿todos gozamos?

MT: pues claro, tienes una situación de goce, y aparece el pensamiento que lo registra como experiencia, lo archiva como recuerdo, lo almacena como conocimiento y luego acciona en consecuencia. No pudiendo repetir jamas aquél estado espontáneo vivido. De allí la degradación y la corrupción que se provoca.

I: lo empiezo a ver...

MT: sigamos andando pues. Es inevitable, entonces, comparar. Y allí el conflicto se hace mas profundo. Has notado que en esos momentos efímeros de quietud, se detiene el pensamiento, y todos sus miserables atributos de confusión...? entonces surge un estado mental diferentes, hay lucidez, energía, éxtasis, es decir estas en pleno goce.

I: me vienen a la memoria muchos momentos así...maravillosos e irrepetibles.

MT: tu lo has dicho, irrepetibles.

I: pero, ¿por qué no disfruto?

MT: de eso estamos hablando...una de las características del acto de disfrutar, es que va acompañado de una sonrisa, de un rostro relajado, mirada suave, viva, muy viva...Tus dudas vienen de la comparación inconsciente que haces con otros momentos, o con los tópicos morales del manual del buen disfrutador....comprendes?. Si hay comparación el disfrute se bloquea y llega la frustración, la auto-exigencia, etc.

I: ¡Lo veo, lo veo! incluso darme cuenta en este momento es un total disfrute...

MT: eso es. Quédate allí. evita comparar y disfruta cada momento de tu vida. Que yo soy testigo de haberte visto reír infinidad de veces.

¿Existe la felicidad?

hoy, alguien me ha preguntado esto...-"¿existe la felicidad?" ....¡vaya cuestión!

Lo primero que se me ocurre es preguntarme a mi mismo esa misma pregunta, entonces surge inmediatamente otra: ¿Cómo he de investigar semejante incógnita?

Si lo considero con seriedad, voy a renunciar de forma rotunda a todo lo que otros hayan dicho sobre la felicidad. ¿por qué? pues, si no lo hago, repetiré la formula de otros, la que más me agrade o se adecue a mis necesidades, sea la definición de las religiones, los filósofos, educadores o gurús de moda. Aparto las influencias y me quedo yo solo observando.

Comprendo que la felicidad es un estado de gracia, momento de total integridad, sin roturas ni divisiones. Pero aun es una definición intelectual.

Sólo esta uno, y lo que sé de mi como hecho irrefutable, es que estoy completamente fragmentado, por mis imágenes, mis conclusiones, mis creencias, mis identificaciones y comparaciones, mis deseos, mis miedos, mi violencia, mi ira... Y comienzo a comprender que la búsqueda de una respuesta semejante se debe a todo el dolor que estos fragmentos han ocasionado y ocasionan en cada momento. A esas heridas que disparan permanentemente un perpetuo signo de soledad.

Comprendo que cualquier búsqueda, surge de esa desesperación, y que verdaderamente no es real, son ilusorias. entonces es mas importante investigar y comprender como funcionan mis falsas conclusiones, que saber si la felicidad o la verdad o dios o el nirvana existen...el poder que tiene toda la fragmentación tiene que terminar, no con el fin de conquistar la felicidad, la realidad, la verdad (ellas no son premios). Todo lo falso en mi tiene que desaparecer, no para lograr lo verdadero..sino porque sencillamente es falso.

Entonces, una vez vacío de contenido, en absoluta quietud interna, sin forzar nada, las respuestas vendrán para Ser vividas.

Madrid

¡¡Qué hermosa es Madrid!! ...esta ciudad emplaza entre sierras... tan urbana, moderna y tradicional, provoca tensiones corporales de forma evidente.

A Madrid hay que caminarla, pero sus cuestas, sus bajadas, las interminables escaleras del metro...etc, determinan que distintas tensiones comiencen a marcar el principio de lo que luego serán contracturas musculares u otras patologías cotidianas.

¿Qué hacer? pues, descansar cuando el cuerpo lo pida, saber mantener un ritmo respiratorio mientras doy el paseo, estirar el cuerpo, y auto-masaje, es decir, pequeñas presiones en la zona lateral de la cadera, a la altura de la cabeza del fémur ( trocanter) , palmadas suaves en el área lumbar, tumbarse en el césped de cualquiera de las maravillosas plazas....(recomiendo Parque del Oeste... Rosales) , y mirar hacia arriba, al cielo, y observar a tu pensamiento....

Sólo observa a tu pensamiento, no juzgues, ni determines, tampoco reprimas o lo presiones. Tan sólo mira-te a través de lo que a tu cabeza viene....

Cuando él se aquieta, entras en relax, ¡es inevitable ese suspiro!

ahora estás mejor para seguir disfrutando Madrid, ¿verdad?

resistencia al cambio

"....por qué los cambios provocan tanto dolor?....."

Este cuestionamiento me lo "arrojo" un paciente....mientras mis dedos desarmaban la tensión en su cuadrado lumbar.

el dialogo fue mas o menos así:

- MT: ¿a qué te refieres exactamente?

- Interlocutor: a eso claramente...¿¡por qué duele tanto todo cuando hay cambios en la vida de uno..!?

- MT: vamos despacio. Existe el dolor físico y el mental-emocional, verdad..? Ahora bien, si tomamos el primero de ellos y hacemos una pequeña prueba, tal vez encontremos respuestas interesantes: Si dejamos por unos minutos, Digamos 7, el puño cerrado con total fuerza, clavando las uñas en la propia palma, enfocando toda la tensión en ese gesto, vemos la incomodidad, el dolor en las articulaciones, la mano se enfría por la dificultosa circulación de la sangre,vemos que cambia de color la piel, además de otros síntomas mas internos...todo eso da paso al dolor físico. Vamos, te invito a que lo hagas.

- I: ya...es cierto, incluso siento un cosquilleo incomodo....y duele.

- MT:continua. Y observa, a medida que los minutos pasan, eso que has descrito empieza a "acomodarse" y te empiezas a acostumbrar....exagerando mucho, podríamos decir que puedo vivir con la mano cerrada en puño....

- I: pues sí...tienes razón, ahora no es como al principio, si hasta ya comienzo a pensar en otras tonterías que debo hacer...Ja, ja..

- MT:o sea que, estamos descubriendo cómo actúan los dolores corporales . Si no estoy atento a ellos, me acostumbro y los incorporo a mi "normalidad corporal"...pero siguen allí.

- I: si, lo entiendo en carne propia, es interesantísimo..

- MT: ahora abre, lentamente, los dedos uno por uno....y dime que pasa.

- I: ¡¡¡Ayyy, es muy doloroso!!! y siento que no puedo hacerlo!!

- MT: puedes, sólo hazlo.

- I:ya está, uff

- MT: lo que provoca el dolor es la resistencia que tiene raíz en la distracción de tus vicios corporales.

- I: ya lo veo claramente, si...y con las emociones pasa igual...!?

- MT: cuando llevamos erróneamente el esquema corporal al campo emocional, sucede esto que acabamos de experimentar...

-I: ¿cómo es eso de llevar el esquema equivocado de un sitio a otro?

-MT: Ahora no hablaremos de eso....lo que si creo, es importante haber descubierto, que los cambios no provocan ningún tipo de dolor, sino que el origen del conflicto está en la resistencia

I:¿ y por qué hay resistencia?

MT: eso mi querido lo veremos, si te apetece, más adelante.

duda

Sólo la comida me alimenta...?

La alimentación esta intima y profundamente relacionada con la salud...¿cuántas veces lo hemos dicho o nos lo han dicho?

.. Pero, ¿eso que significa? ¿Acaso no es evidente que de acuerdo a la forma y a qué comas, será tu salud?

detengámonos un poco y caminemos más despacio, porque creo que es interesante desgranar este tópico sobre la alimentación..

Lo primero que se me ocurre es preguntarme si lo único que me "alimenta" es lo que entra por mi boca y le llamamos comida..creo que no..., sino recordemos esos dias de estrés, en donde un sorbo de agua nos "infla" la tripa, o todo nos lo que masticamos nos irrita.

Sabido es que aquellas comidas ricas en grasas saturadas, azucares, frituras, etc, ejercen una acción negativa sobre la salud y la funcionalidad del cuerpo...ni que hablar del alcohol..

Encontrar la medida adecuada a cada persona o modificar los hábitos alimenticios debería ser pues la solución a muchos los problemas....y sin embargo no es así. Entonces, si reflexiono sobre que representa el acto de comer, si observo mis acciones devoradoras (no frente al plato de cocido) o todo lo que "me trago" y no digiero, o todo lo que "meto en mi boca para callar", etc, se abrirán frente a mi una serie de respuestas y descripciones de mi mismo, que me permitirán tener la claridad, y por ende la energía necesaria, para cambiar, modificar o desterrar hábitos que no me satisfacen ya... y los repito varias veces por día, deteriorando gradualmente mi bienestar.

Aparentemente, este texto puede denotar un fantasma moral...pero no, nada de eso...

un poco de mi

Desde hace mas de 20 años, me dedico a las distintas técnicas de terapias corporales, y es la manipulación muscular, la rama que más aplico para el alivio de los dolores o dificultades que se pudieran encontrar.

Esto implica, evidentemente, que he tocado miles de cuerpos. No exagero cuando digo miles. y sigo viendo cotidianamente como el contenido psíquico del paciente, es el principal motivo de los males cotidianos.

Con "contenido psíquico" me refiero a los aspectos que caracterizan la manera de ser de alguien. No desde la mirada de las profesiones de la mente, como el psicoanálisis u otras materias hermanas, sino mas bien desde la simple observación de conceptos, creencias, conclusiones etc, que hacen que nos paremos de determinada y única manera, frente a los sucesos diarios...y desde allí a caer en algún malestar o enfermedad.

¡Cuidado! lo que digo es que si aprendemos y vemos verdaderamente el papel que nuestro pensamiento (con su complejo contenido) tiene en la salud; y descubrimos su entramado, tenemos la posibilidad de evitar que diferentes patologías- que nos llevan de las narices - hagan de las suyas y nos quiten la posibilidad de reír mas seguido. Eso no significa que nunca mas estornude, o me duela la cabeza, sino todo lo contrario, voy a estar relajadamente alerta a todo lo que soy y me sucede, sin resistencias, para comenzar a conocer-me, comprender-me y lograr una mejor calidad de vida.

".......yo nací para mirar

lo que pocos quieren ver,

yo nací para mirar......¡¡mira!!....."